Si nos alejamos de la experiencia que ya tenemos con este tipo de tecnología, los sensores biométricos para huellas dactilares, poca diferencia podríamos vislumbrar en un sistema que “escanea” la superficie de nuestro dedo y la compara con la base de datos para determinar coincidencias e identificar al usuario. Sin embargo, el funcionamiento de los mismos, y sus diferencias, son en realidad fundamentales y pueden detectarse a la perfección en la experiencia de uso, donde el iPhone 5s supera con creces a su principal rival, el Samsung Galaxy S5.

El sistema de activación del sensor biométrico

Aunque no se haya comentado apenas, los sensores biométricos de este tipo suponen un consumo de energía considerable, motivo por el cual Samsung y Apple han ingeniado, cada cual, un sistema de activación del mismo. Así, en el iPhone 5s nos encontramos con que el sensor está rodeado por un aro metálico conductor que activa el sensor Touch ID cuando lo tocamos. Por su parte, el correspondiente al Samsung Galaxy S5 es activado a través de la propia pantalla, desde la parte más baja y cercana al propio sensor. En realidad, en este sentido, estamos ante tecnologías muy similares, con la diferencia de que el Samsung Galaxy S5 obliga al desplazamiento, mientras que el iPhone 5s permite mantener el dedo estático desde el primer al último momento de su uso.

Touch ID: el sensor de Apple es más inteligente y cómodo

El principal defecto del sensor biométrico del Samsung Galaxy S5, con respecto a Touch ID en el iPhone 5s, lo encontramos en que el dedo tiene que ser colocado de forma “recta”. ¿Qué quiere decir esto? La punta del dedo que utilizamos para nuestra identificación no puede, en ningún caso, estar en dirección a uno de los lados, sino siempre mirando hacia la parte superior, donde encontramos el logo de Samsung. El sensor Touch ID del iPhone 5s, sin embargo, permite que el dedo sea colocado con la punta en cualquier dirección, y la experiencia de uso se vuelve más cómoda y fluida.

Este hecho recién señalado, vuelve realmente difícil la utilización del sensor biométrico en el Samsung Galaxy S5 con una sola mano, mientras que la situación favorable del sensor Touch ID hace posible el desbloqueo con nuestra huella digital en el iPhone 5s utilizando, únicamente, la mano con la cual lo desbloqueamos y vamos a utilizarlo.

Samsung podría rectificar con el Galaxy Note 4

De cara al próximo gran lanzamiento de Samsung en materia de telefonía inteligente, que se espera tenga lugar en septiembre, las cosas podrían cambiar favorablemente. Según las últimas filtraciones, el gigante surcoreano líder en tecnología de consumo solventaría este contratiempo detectado en el Samsung Galaxy S5 aplicando, en el Samsung Galaxy Note 4, la misma tecnología del iPhone 5s o una muy similar. En este caso, no sólo se adelantó Apple con la incorporación de este sensor biométrico, sino que los resultados han sido mejores. No obstante, y refiriéndonos a sensores biométricos, Samsung ha tomado la delantera cuidando la salud del usuario incluyendo un monitor de ritmo cardíaco bajo el módulo de cámara principal.

 

Fuente: adslzone