Para estimar la evolución del mercado de televisión de pago la CMT ha usado datos históricos que han sido ajustados a una curva logística cuyo valores alcanzables a 2023 no superarían los 8,3 millones de abonados. En el informe se ha supuesto que la televisión por satélite se encuentra en saturación y que además la TDT de pago absorberá al satélite.

Además, hay que tener en cuenta que los servicios que se va a prestar sobre fibra óptica presentan mejores posibilidades de interactividad que el satélite o la TDT. Por ejemplo, Telefónica está probando canales en Alta Definición (HD), Imagenio en tres dimensiones o servicios multiroom que permiten ver diferentes canales en HD en el mismo hogar.

Para la televisión por cable se ha adaptado una curva logística a los valores históricos. Se observa que no es posible alcanzar demandas por encima de los 3 millones de abonados en 2023. En este sentido, los operadores como Ono, R o Euskaltel también ofrecerán servicios avanzados gracias a la evolución tecnológica DOCSIS 3.0.

Digital+, un monopolio en extinción

Además de la deuda que tiene la plataforma de Prisa, la televisión por satélite no tiene futuro en los próximos años. Únicamente en zonas rurales donde no desplieguen red los operadores o la TDT llegue con dificultades tendrá sitio. De hecho, durante los últimos meses, Digital+ ha perdido clientes y por primera vez tiene menos de dos millones de abonados.

 

Fuente desde: adslzone