La última nota mensual publidada por la Comisión del Mercado de las Telecomunicaciones sobre el mes de diciembre ha venido a ratificar lo que se temía a lo largo de los últimos meses. El desplome de la telefonía móvil fue drástico durante el pasado 2012, con una pérdida de líneas cifrada en 2.766.465 a lo largo del año. Esto da una media de más de 230.000 líneas perdidas cada mes del año, una cifra sin parangón años atrás.

Motivos para esta caída

Desde el regulador de las telecomunicaciones se ve en la crisis económica uno de los motivos claros para esta caída en el número de líneas móviles. Los recortes empresariales han sido también importantes para entender este desplome, dado que la constante destrucción de empleos ha conllevado un menor número de líneas en las empresas. En total, el número de líneas de móvil personales quedó situado en algo menos de 53 millones a finales de diciembre.

En el primer semestre del año dejaron de utilizarse más de 725.000 líneas móviles, pero tras el verano llegó una caída más drástica si cabe. El mes de octubre evidenció los problemas del sector con la mayor caída mensual desde que se auditan las cifras. En el último mes del año asistimos a un nuevo retroceso con más de 277.000 líneas perdidas, motivado principalmente por la pérdida de líneas de prepago (más de 343.000 líneas de esta modalidad dejaron de existir) y las de las tarjetas datacards (las referidas habitualmente a las conexiones USB) con 84.636 líneas menos. De este modo, el aumento en las líneas de contrato (algo más de 151.000) no compensó la caída.

En lo que respecta a los operadores volvimos a asistir a un gran resultado del grupo de Operadores Móviles Virtuales (OMV), que tuvieron una ganancia neta superior a las 102.000 líneas. Por detrás hallamos a Yoigo, que sumó 38.280 líneas y consiguió un dato positivo mientras que los operadores tradicionales tuvieron registros negativos. Concretamente, Movistar y Vodafone perdieron 196.000 y 195.000 líneas respectivamente mientras que Orange hizo lo propio con 26.780.

Con este panorama se inicia un 2013 que por ahora no ofrece esperanzas de mejoría en la situación económica general en el país. Veremos cómo afecta esto al sector de las telecomunicaciones, que por ahora solo tiene en la banda ancha fija su motor de crecimiento, ya que a lo largo del pasado año creció en 416.000 altas netas.

 

Fuente: adslzone