El compromiso adquirido en la Agenda Digital europea por los países miembros intentará acelerar el desarrollo de las conexiones de alta velocidad en nuestro continente. Para ello será necesaria una inversión y estudio de nuevas tecnologías que permitan que las conexiones ultrarrápidas sean una realidad en los años que restan hasta 2020. A priori, las redes de fibra óptica y su despliegue masivo son parte de la solución para alcanzar dicho compromiso, pero no nos podemos olvidar de la amplia capacidad que aún permiten otras redes como las híbridas de fibra y cable coaxial (denominadas HFC).
En la actualidad, son varios los operadores los que cuentan con estas redes en nuestro país. Ono, Euskaltel, R o Telecable son ejemplos de este tipo de infraestructura que permite ofrecer conexiones de alta velocidad y cuyo futuro es aún muy amplio. A día de hoy están implementando el estándar Docsis 3.0 en estas redes para ofrecer banda ancha ultrarrápida. Por ejemplo, la cobertura de Ono con dicha tecnología es ya de 7 millones de hogares los cuales pueden acceder a Internet con sus conexiones de 50 Mbps / 5 Mbps y 100 Mbps / 10 Mbps.
No obstante, aunque el camino por recorrer aún por esta tecnología es amplio para permitir conexiones que podrían llegar a los 320 Mbps / 120 Mbps, otro estándar se vislumbra en el horizonte a medio plazo para multiplicar las velocidades reales de conexión. Se trata del denominado EPoC (EPON over Coaxial), que podría servir para que los operadores ofreciesen conexiones difíciles de imaginar por ahora. Hasta 10 Gbps tanto en velocidad de bajada como de subida podrían alcanzarse gracias a una tecnología que convivirá en sus primeros años con el Docsis 3.0.
¿Cuándo podríamos ver este tipo de conexiones en España? Como siempre sucede con este tipo de informaciones, el desarrollo no se producirá a corto plazo. Aunque se ha especulado con la posibilidad de la implementación de EPoC dentro de aproximadamente 5 años, quizá sea pronto para que sea una realidad, puesto que depende de varios factores técnicos en los que están involucrados varias partes, desde los operadores a los desarrolladores de hardware. En cualquier caso, se trata de una gran noticia, puesto que los operadores de redes híbridas siguen aumentando su presencia en nuestro país, por lo que seguirán contribuyendo a que la alta velocidad en España sea una realidad.
Fuente: adslzone
