El servicio de música en streaming por excelencia ha dado un golpe en la mesa y ahora ofrece música gratuita a todos sus usuarios de forma ilimitada, sin restricción de tiempo. Parece que la llegada a este negocio de la popular marca de auriculares Beats ha hecho que Spotify se ponga las pilas para seguir siendo el líder del sector musical en internet.
Hasta ahora, todo aquel que no tuviera contratado una opción de pago en Spotify tenía únicamente 2 horas y media de música con publicidad cada semana, después de los seis meses de prueba. Pero la llegada de Beats ha cambiado el chip de la compañía sueca. Obviamente, que en noviembre del año pasado anunciaran una recaudación de 250 millones de dólares ayuda bastante, hasta para ofrecer música ilimitada gratis a todos sus usuarios, eso sí, con publicidad.
Es muy posible que este movimiento, este órdago en la mesa del negocio de la música en streaming esté producido por la llegada de Beats. La empresa, famosa por vender los mejores cascos del mercado, llegó a un acuerdo la semana pasada con AT&T, para lanzar un servicio de música en streaming de pago, con 7 días de prueba gratuita, que serán 30 si son clientes de la compañía telefónica y 90 si es una familia entera. Beats costará 9,99$ al mes, y tendrá la posibilidad de ser contratado por una familia por 14,99$ al mes. Esta opción facilitará que cinco usuarios distintos puedan escuchar Beats desde 10 dispositivos distintos.
Modelo ‘freemium’
De momento, Beats solo se lanzará en Estados Unidos, eso sí, con una campaña de marketing brutal que podría incluir un anuncio en la Superbowl, algo que parece que ha asustado a Spotify.
Por ello, con su modelo freemium ahora ofrecen mucho más que sus más directos rivales, música ilimitada de forma gratuita. Parece que Spotify sigue la premisa comercial que dice que cuánto más tiempo utilice una persona un servicio, más probabilidades hay de que en algún momento decida pagar por utilizarlo. Pero claro, esto tiene un coste económico que parece que ahora Spotify quiere y puede pagar.
