El problema no reside en el tráfico de datos en sí, sino en otro tipo de tráfico. Es el llamado tráfico de control, que de lo que se encarga básicamente es de establecer la conexión. El problema de la constante desconexión para ahorrar batería que realizan los Smartphones es que les obliga a reconectarse constantemente para comprobar por ejemplo si hay correo nuevo. De esta forma se genera un cuello de botella en el tráfico de control. Uno de los ejemplos más claros es la BlackBerry, que ocupando apenas un 2% del tráfico de datos ocupa más de un cuarto el tráfico de control.

Ya se está trabajando para implementar el  estándar 3GPP, que por ejemplo en el iPhones llega a reducir un 55% el tráfico de control donde la red lo permite. Aunque es cierto que en España aún no ha habido problemas serios, tarde o temprano nos veremos en la misma situación sino se adopta una solución en poco tiempo.

 

Fuente: adslayuda