Sin embargo, al poco, Telefónica dio de baja esa linea en beneficio de Jazztel, que empezó a fracturarle. Tras reclamar a Jazztel para que renunciara a esa linea y la devolviera a Telefónica y negarse los primeros a asumir los gastos de esa operación, a esta persona no le quedó otra que acudir a la Asociación de Usuarios de Navarra Irache, que presentó, en su nombre, la pertinente denuncia.

El que estemos hablando de Wanadoo ya nos indica que el asunto no es de ayer precisamente, suena más bien cuando el escándalo de 2006, cuando el call center de Argentina recibía unas directrices de actuación poco éticas y más de un caso de estos se produjo.

Afortunadamente algo hemos evolucionado en estos últimos años y estos fraudes cada vez se producen menos.

 

Fuente desde: adslayuda