Leemos en El País la información sobre el caso que enfrentaba en los tribunales a la entidad gestora belga Sabam y Scarlet, operador del mismo país, y que podría suponer un antes y un después en el intercambio de archivos en Europa. El caso se remonta hasta 2004 y con la decisión que ha tomado el Tribunal Europeo podría haber finalizado con victoria para la homóloga belga a entidades como SGAE o EGEDA.

En el citado año Scarlet se negaba a la instalación de un sistema que filtrase en las conexiones a sus usuarios las redes P2P como BitTorrent o eMule tal y como había solicitado Sabam como medida para acabar con el intercambio de contenidos protegidos por derechos de autor. Tras recurrir la gestora a un tribunal de Bélgica, éste le dio la razón, ante lo cual el operador recurrió. Fue entonces cuando el tribunal de apelación belga remitió el caso al Tribunal Europeo para conocer su criterio.

Ahora, el juzgado de la Comisión ha confirmado que las directivas europeas no impiden que un juez nacional pueda obligar a la instalación de estos filtros. El Tribunal Europeo señala, eso sí, que dicho juez habrá de vigilar que la medida sea "proporcional atendiendo al objetivo perseguido y a los diferentes derechos en juego", aunque a todas luces parece poco proporcional el bloqueo todo un servicio, ya que en él no sólo circulan contenidos con copyright.

En la respuesta del Tribunal Europeo se pueden observar distintos puntos de vista de los gobiernos de la Unión. El del país belga ha señalado que si bien no se pueden imponer de forma genérica y por tiempo indefinido de estos filtrados, el juez sí puede ordenar estas medidas para casos concretos. En el lado opuesto hallamos a los de Países Bajos y Finlandia, que creen imposible la creación de estos sistemas preventivos de forma obligatoria.

Así pues, paso peligroso el dado por la Comisión Europea, ya que se abre la puerta a que los titulares de derechos de autor emprendan acciones contra los operadores de banda ancha para que implanten estos controvertidos sistemas, que parecen legítimos a ojos de la Unión y que podrían suponer un antes y un después en la libertad en Internet.

 

Fuente: adslzone