En contra de lo que todo parecía, la voz de la comunidad internauta se ha hecho oír en el Congreso. Las manifestaciones de protesta que se han dado en los últimos días en la Red han sido escuchadas la clase política opositora a los planes del Gobierno, trazados por Estados Unidos y la industria cultural como se demostraron en las presiones reveladas por WikiLeaks.

El partido nacionalista catalán Convergencia i Unió ha dado su voto en contra en la votación sobre la Ley de Economía Sostenible llevada a cabo por la Comisión de Economía y Hacienda del Congreso. De este modo, se ha unido al grupo en contra desde el comienzo formado por ERC, IU, ICV, BNG y Nabai y al que se han unido el Partido Nacionalista Vasco y Coalición Canaria. Por su parte, los miembros en la Comisión del Partido Popular se han abstenido. Al no contar con mayoría absoluta en la votación, la ley quedará bloqueada y no se podrá aprobar con su actual redacción. El PSOE no aceptó las exigencias de CiU y por eso éstos se retiraron su apoyo en último momento. El PP tampoco se mostró dispuesto a ayudar tras el intento del PSOE de conseguir su apoyo.

Tras la derrota parlamentaria de esta polémica norma -ya que no puede calificarse de otra forma dado el empeño que el PSOE ha puesto en su aprobación-, falta por conocer la postura de los perdedores. La portavoz socialista en la Comisión, Marta Gastón, ha llegado a asegurar que el rechazo a esta norma supone un revés contra la creación artística en nuestro país, afirmando que "si protegemos más a los ladrillos que a las ideas, estaremos condenando a nuestros jóvenes a seguir fabricando ladrillos".

El rechazo de la ley en el Congreso implica que ahora debe pasar revista en el Senado, lugar donde el PSOE no cuenta con mayoría absoluta.

¿Decepción en la Casa Blanca?

Mientras, desde el Gobierno de Estados Unidos y su potente industria cultural desconocemos su postura oficial, pero dada su injerencia en la elaboración de este texto podemos preveer que se hallen decepcionados. En igual situación se encontrará la Coalición de Creadores, el grupo de presión de la industria cultural en nuestro país.

No obstante, este grupo, presidido por Aldo Olcese, ya anunció horas antes de la votación definitiva que recurrirán a la Unión Europea para que se tomen medidas en contra de los usuarios que intercambian archivos y vulneran así, en su opinión, los derechos de autor. Estas medidas pasarían por las multas a estos usuarios o sanciones en forma de desconexiones de su acceso a Internet, tal y como se ha promovido desde otros países como Francia y Reino Unido.

Batalla vencida en esta intensa lucha. La guerra aún no ha finalizado y las partes que hoy saborean su amarga derrota prometen luchar al máximo por sus intereses, aunque se pase por encima de los derechos de los usuarios en Internet.

¡Gracias Internautas, entre todos lo hemos conseguido!

 

Fuente: adslzone