No es nueva la intención de la ministra de Cultura de imponer el canon digital a los operadores de ADSL en nuestro país. En julio de 2009 González-Sinde abogó por actuar contra la "fuente ilícita" para acabar con los contenidos que infringen los derechos de autor y, asimismo, no descartó imponer una tasa a los proveedores de Internet de nuestro país en su función de "conductores" de estos contenidos.

Además, la política y ex presidenta de la Academia de las Artes y las Ciencias Cinematográficas de España en el periodo de 2006 a 2009 ya se posicionó junto a Teddy Bautista, presidente de la Sociedad General de Autores y Editores (SGAE), en favor del canon digital e incluso afirmando que no es suficiente para compensar la piratería. Su intervención fue un ataque frontal hacia las conexiones domésticas que ahora pone a los operadores en el principal punto de mira tras la última decisión del Tribunal Superior de Justicia de la Unión Europea.

Según la ministra las conexiones ADSL sólo sirven para "piratear"

"¿Para qué necesitamos todos una línea de ADSL de no sé cuanto gigas? ¿Para mandar emails? Telefónica sabe que el 80 por ciento del volumen de tráfico en sus líneas es descarga de archivos", declaró en su momento la actual ministra, quien aseguró que los internautas españoles "no necesitamos ADSL de gran velocidad, ya que todos los que contratan 20 megas lo hacen para descargarse contenido protegido".

No es, por tanto, descabellado inclinarse a pensar que fuesen los operadores de telecomunicaciones quienes soportasen el canon que millonarios beneficios ha proporcionado a las entidades gestoras de derechos de autor como la SGAE. En mayo de este mismo año conocimos que la gestora ingresó 27,7 millones de euros en concepto del canon digital aplicado a soportes y dispositivos electrónicos. Esta cantidad es incluso mayor que la que recaudó en el mismo periodo por la venta de música.

La industria del cine ya ha convertido a los operadores en chivo expiatorio de sus problemas en más de una ocasión. La última de ellas fue recientemente, cuando el director de cine Bigas Luna afirmó que éstos se aprovechan de su trabajo sin pagar ninguna compensación por ello y lamentando que "nadie se atreve con los operadores". Quizá ahora la alternativa del Gobierno pase por "atreverse" con ellos aplicándoles este impuesto, que podría repercutir en el precio final de las conexiones para los usuarios.

 

Fuente: adslzone