Esta práctica viola las propias reglas de Facebook y vuelve a abrir el debate sobre la capacidad de esta red social para mantener a salvo información identificable acerca de sus usuarios. El problema enlaza directamente con ese cada vez mayor número de empresas que desarrollan enormes bases de datos de gente que les permite seguirles en Internet.

Un representante de Facebook admitió que “el ID de un usuario de Facebook puede haber sido compartido de forma inadvertida por parte del navegador de Internet del usuario o por una aplicación“, aunque según aseguraba ese mismo representante, “dichos datos no dan acceso a información privada del usuario de Facebook“.

Parece que Facebook está comenzando a bloquear algunas aplicaciones que se comportaban de este modo y hay ciertas acusaciones a empresas como RapLeaf que parecen haber utilizado esa información para dirigir su publicidad a esos usuarios, aunque los responsables de esta firma afirman que este tipo de mecanismo existe gracias a la especificación HTTP y que se trata de un mecanismo benigno que, eso sí, puede incomodar a los usuarios que tratan de proteger su privacidad.

 

Fuente: muyseguridad