Los manifestantes querían mostrar con carteles que decían "Don't Be Evil" (aludiendo a una campaña de publicidad de Google en el pasado) su desagrado ante el gigante de Internet por haber traicionado sus propia postura y amenazar la neutralidad de la red, considerada por ellos un derecho indispensable. No eran especialmente numerosos, pero han sido efectivos.

No se trata del único problema que ronda la cabeza a los directivos de la compañía, sino que a las críticas recibidas hay que sumarles las que ya llegaron desde Alemania por violar la privacidad con su servicio Street View (dentro de Google Maps), y que ahora se extienden a otros países de la Unión Europea, entre ellos España.  No es de extrañar que desde la Asociación de Internautas animen a Google a conservar su buena imagen entre sus usuarios sin realizar una campaña de "hostilidad" hacia ellos ya que, si lo hacen, "correrían peligro". De momento ya se han negado la posibilidad, pero habrá que esperar a ver si con un lavado de cara recuperan esa posición de "referente en la defensa de la neutralidad de la red y de la privacidad de los ususarios".


Fuente: adslayuda