Tras años esperando su modificación, parece que la Digital Millenium Copyright Act por fin se pone un poco más de parte de los ciudadanos. Esta ley ha agregado ciertos puntos que flexibilizan el actual copyright permitiendo excepciones extraordinarias en algunos casos en los que un usuario puede quebrar de forma deliberada la administración de derechos digitales (DRM en sus siglas en inglés) impuesta por ciertos fabricantes.

El aspecto que más ha llamado la atención de su decisión ha sido la legalización de la liberalizaciónde los teléfonos móviles. El proceso conocido como jailbreaking en teléfonos móviles como el iPhone y el rooting en teléfonos basados en Android, entre otros, ahora es legal. Ambos procesos no validan ningún reclamo de copyright por parte de los fabricantes, ya que la idea es ejecutar código desarrollado por terceros, sin afectar la propiedad intelectual.

Apple había realizado una campaña en contra, alegando que desbloquear su iPhone abría la puerta a "la posibilidad de daños al móvil y a defectos en el funcionamiento del teléfono y sus aplicaciones". Según el fabricante, recibe "millones de casos" de problemas por el desbloqueo de sus iPhone. "Legitimar el desbloqueo significaría un aumento de virus en los aparatos", afirmó la compañía, que ya no podrá tomar medidas legales ante el ciudadano que modifique el código del software de su iPhone.

Extracción legal de fragmentos de películas

Pero la modificación de las normas de copyright no han quedado aquí. Desde ahora, es posible rippear DVD "en pequeñas porciones" para uso educativo no comercial, es decir, la extracción de un trozo de película concreto con la posibilidad de cambiarle la música o el diálogo. A este respecto había aludido recientemente Google poniendo el ejemplo de usos concretos que se realizan en vídeos subidos por los usuarios a Youtube.

Igualmente, se pueden utilizar modificaciones para superar viejas protecciones a través de hardware y se autoriza la anulación de sistemas anticopia de videojuegos con objetivos de investigación o en busca de fallos de seguridad.

Aunque la revisión ha supuesto un claro avance, aún no se han legalizado aspectos como el rippeo de las películas al completo o la copia de canciones con DRM, que sigue siendo algo ilegal. Quizá sea dentro de dos años -fecha en la que se volverá a revisar la norma- cuando lleguen estas medidas que a buen seguro levantarán ampollas en el seno de la industria cultural.

Fuente: adslzone