La situación económica del país está afectando considerablemente en todos los servicios relacionados con las telecomunicaciones. Los abonados hablan menos por teléfono e incluso buscan ofertas de ADSL más baratas con el objetivo de llegar a fin de mes. Según los datos presentados por el regulador esta mañana, en abril se sumaron menos de 62.000 abonados y los próximos meses podrían ser peores. Históricamente los meses de junio, julio y agosto son extremadamente negativos pero este año el poder adquisitivo de las familias es inferior y la subida de impuestos podría ser un factor clave para que se deje de contratar banda ancha.

¿Qué deben hacer los operadores?

En junio hemos asistido a nuevas promociones de ADSL e incluso rectificaciones. Por ejemplo, Jazztel se vio obligada a rebajar de 14,98 a 7,95 euros el precio promocional de sus ofertas por la competencia de los alternativos y por el presumible descenso en el número de contrataciones. En este momento las compañías están más centradas en la contención de bajas que en la propia captación. Ni si quiera las ofertas de bienvenida son suficientes para que los usuarios se animen a contratar Internet en los hogares.

En otros países los ejecutivos han adoptado planes de ayuda para colectivos como jóvenes o desempleados para que contraten ADSL. Por ejemplo en Italia el Gobierno subvenciona con 50 euros las nuevas altas de ADSL en jóvenes.

Los próximos meses prometen ser muy duros con los operadores y el único antídoto para reactivar las altas parece una rebaja considerable en los precios.


Fuente: adslzone