La forma de hacerlo era a través de capturas realizadas desde un coche que recorría las calles y recogía información a su paso, lo cual ha dado lugar a serias quejas (en Alemania especialmente) durante los últimos meses.

Ahora, con el fin de evitar la polémica, la compañía del buscador más popular ha decidido no facilitar los más de 600 Gb en datos de acceso inalámbrico con el resto de internautas y quitarse semejante cantidad de información de encima.

Por desgracia, en vez de borrar los datos de un modo seguro, han considerado más oportuno facilitárselos a los respectivos gobiernos de Alemania, Francia y España. Algo que no parece lo más apropiado si ‘The Inquirer’ tiene razón al afirmar que “pueden contener información privada como conversaciones, e-mails e incluso cualquier tipo de contenido.” ¿Vosotros qué opináis sobre esto?


Fuente: adslayuda