El cobro a los propietarios de líneas de banda ancha (6 libras al año) permitirá al ejecutivo recaudar hasta 175 millones de euros anuales que contribuirán al despliegue de una red de fibra óptica hasta el hogar en zonas no competitivas donde los operadores privados no van a invertir.

El impuesto entrará en vigor a partir del 1 de octubre de 2010 y según el canciller Alistair Darling, tiene como objetivo situar a Reino Unido a la vanguardia de Europa.

"El coste de 50 peniques mensuales permitirá desbloquear la inversión privada y el 90 por ciento del país podrá acceder a la próxima generación de banda ancha en 2017".

2020 fecha límite

A principios de esta semana, el primer ministro Gordon Brown se comprometió a llevar fibra 100% del territorio en 2020. Recordamos que las previsiones para España estiman que en 2023 el 45% de los hogares tendrá fibra.

¿Asumirías un coste de 50 céntimos al mes para subvencionar una red de fibra en el futuro? o crees que deben ser los operadores o el Gobierno quien financie el despliegue.


Fuente: adslzone