César Alierta, presidente de Telefónica fue quien inició la polémica asegurando que los operadores hacían posible que los buscadores y gigantes de la red desarrollaran su negocio. Por eso propuso que se estudiara la posibilidad de establecer un peaje que ayudara a mantener las redes de telecomunicaciones. Miguel Sebastián, Ministro de Industria, apoyó la propuesta de Alierta y aseguró durante el Mobile World Congress que se estudiaría en Bruselas.

Un mes después, parece que el Gobierno ha dado marcha atrás y ha remitido un informe a Bruselas suavizando la propuesta enviada en enero a la UE.

Según publica el País, el capítulo más interesante de ese documento remitido en enero es el que se refiere a la neutralidad de la red, un principio fundacional de Internet que afirma que la Red ha de tratar por igual todo el tráfico que circula por ella, y que los operadores no pueden discriminar a ningún proveedor de contenidos, según sus intereses. El Gobierno sostenía que las empresas como Google e intermediarios tenían una posición privilegiada. Ahora, en el nuevo documento se ha quitado toda referencia concreta a las ventajas competitivas de los intermediarios de Internet, y se limita a pedir que se asegure "la competencia efectiva en el mercado convergente de redes, servicios y aplicaciones, que pueda exceder el ámbito de las comunicaciones electrónicas".

Desaparece la polémica tasa del texto

De la necesidad de crear un un canon especial para los buscadores, se ha quedado sólo un ambiguo párrafo: "El nuevo marco regulatorio se centra en las redes por lo que quizás no tenga en cuenta el conjunto de implicaciones sobre la inversión, la innovación y el beneficio para los ciudadanos". Es evidente que el Gobierno planea dar marcha atrás en su propuesta y de ese modo se desmarca de las declaraciones de César Alierta.


Fuente desde: adslzone