Si los usuarios de Movistar, Vodafone y Orange pasan siete, diez y trece meses respectivamente sin consumir el saldo prepagado, las operadoras se quedan con la cantidad abonada, además de dar de baja las líneas.

Así, FACUA considera que las condiciones de uso de prepago de las tres compañías son abusivas. Además, reclama que el dinero perdido sea reintegrado a los clientes. Señala que si las compañías consideran que determinados clientes pueden no resultarles rentables, están en su derecho a establecer determinadas condiciones de consumo, pero siempre que éstas no resulten abusivas y devuelvan el saldo a los usuarios a los que den de baja.

Con Movistar, si los usuarios no realizan una recarga en siete meses, la compañía se queda con el saldo. Tras seis meses sin recargas, restringe el tráfico saliente y pasado el séptimo mes, sólo permite recibir SMS durante 15 días después de los cuales se anula todo el tráfico. Con Vodafone, si no se recarga en diez meses, se pierde el saldo y el número. En el décimo mes, sólo pueden recibirse llamadas. Con Orange, se pierde el saldo y el número si no se recarga en trece meses. Durante el último mes, sólo se puede recibir llamadas o conectarse a Internet.


Fuente desde: adslayuda