El estudio, basado en un test de velocidad anual que realiza el sindicato de Trabajadores de Comunicación (CWA), concluye que la velocidad de conexión en EEUU ha aumentado sólo 1.6 megabits por segundo en los últimos dos años, y actualmente se sitúa en 5.1.

A este ritmo de crecimiento, advierte la asociación, el país tardará aún tres lustros en alcanzar los 20.4 megabits por segundo que ya experimentan los surcoreanos.

Además, otros 27 países aventajan a EEUU en velocidad de conexión, encabezados por Japón, con 15.8 megabits por segundo, Suecia, con 12.8, y Holanda, con 11.

La velocidad media actual de internet en Estados Unidos implica que deben emplearse 35 minutos para descargar cien fotografías de unas vacaciones familiares, y cuatro horas para añadirlas a la red.

Del mismo modo, mientras que un usuario de Japón tarda 12 minutos en subir a internet un video de alta definición, el estadounidense debería invertir dos horas y media.

Esto supone, según el informe, que las conexiones estadounidenses son insuficientes para cubrir las necesidades de, por ejemplo, los enfermos que están en casa y requieren que supervisen su estado desde el hospital, los estudiantes de universidades virtuales o los empresarios que pretenden dirigir un negocio moderno desde casa.

El informe subraya desigualdades en la infraestructura de internet del país, entre las que destaca el hecho de que el 18% de los usuarios que tomaron el test en el que se basa el estudio no cumplían los requisitos básicos de lo que la CWA considera una conexión de banda ancha a la red.

 

Fuente desde: La Opinion