Una importante cantidad de los coches eléctricos está conectada a redes domésticas privadas que, por razones evidentes, cuenta con medidas de seguridad mucho más bajas que una red eléctrica comercial. Un atacante podría encontrar la dirección IP del cargador eléctrico, lo que les permitiría explotar cualquier tipo de vulnerabilidad. Las posibilidades están desde deshabilitar la carga del vehículo hasta dañar incluso la batería del coche eléctrico o de cualquier otro aparato a la red eléctrica. Los cargadores para coches eléctricos pueden ser una ‘puerta de acceso’ a otros sistemas informáticos en el ámbito doméstico.

El cargador de tu coche eléctrico puede poner en riesgo a tu propio coche y ‘otros sistemas informáticos’ en el ámbito doméstico

Desde Kaspersky Lab, David Emm, investigador de seguridad, ha señalado que ‘es fácil olvidar que en un ataque dirigido, los ciberdelincuentes tienden a buscar los elementos menos obvios para pasar desapercibidos’. Es decir, que cosas como un cargador para coche eléctrico pueden convertirse en su perfecto aliado para acceder a otros dispositivos conectados en red. En este caso concreto, el fabricante –que no ha sido especificado- fue alertado y ya ha resuelto la vulnerabilidad de los cargadores. No obstante, desde Kaspersky Lab querían avisar al respecto.

Es importante, como indican, que se lleven a cabo actualizaciones periódicas a nivel de software por parte de los fabricantes. Y los usuarios, en los casos en que corresponda, según indican desde Kaspersky Lab es importante que cambien sus contraseñas y no dejen las configuradas de forma predeterminada. Además, también recomiendan que se aisle la red doméstica de los dispositivos personales o familiares para búsquedas básicas en Internet.

 

Fuente: techradar | adslzone