Mientras que esta es una batalla que se viene librando desde hace ya casi dos décadas, a lo largo de estos años los objetivos para acabar con estas prácticas han ido cambiando de manera importante. Mientras que antaño los principales elementos marcados eran los diferentes portales y plataformas que ofrecían estos contenidos de manera ilegítima, ya fuese en forma de torrents o con descargas directas, estos han cambiado sustancialmente.
Y es que viendo que generalmente los éxitos cosechados contra los portales pirata son escasos, estos grupos antipiratería se han lanzado a por los intermediarios, todo para evitar que esos sitios web a los que nos referimos, de un modo u otro lleguen al usuario final. Por tanto aquí entran en juego empresas y servicios que en principio nada tienen que ver con la piratería como tal, pero que igualmente están siendo señaladas y presionadas. En concreto nos referimos a elementos tan importantes en Internet como son los buscadores, las redes sociales, los proveedores de Internet, los fabricantes de determinados dispositivos, o los desarrolladores de algunos programas totalmente legales.
Estas son empresas que de la noche a la mañana se han visto envueltos en una batalla en la que en un principio no tienen nada que ver, lo que está generando una gran polémica en muchos países, ya que muchas de las firmas señaladas no quieren pasar por el aro en cuanto a las restricciones que se les está pretendiendo imponer.
Hollywood sigue persiguiendo a los intermediarios para acabar con la piratería
A pesar de todo ello, Hollywood y sus asociados no parece que se vayan a rendir en este sentido, ya que continúan involucrando a empresas ajenas a todo ello para así no tener que enfrentarse directamente con los que operan de manera ilegal. Así, ahora se ha sabido que según la legislación estadounidense, estas empresas son consideradas como intermediarias neutrales, pero, según la MPAA o Asociación Cinematográfica de América no está en absoluto de acuerdo. De hecho esta organización considera que estas compañías en principio neutrales, deberían asumir una mayor responsabilidad por su papel en el ecosistema de la piratería en general.
Este es un grupo que considera que, a pesar de los avances que se han realizado estos últimos años para acabar con estas acciones ilegales de consumo, la piratería sigue siendo un gran problema en la mayoría de los países, algo que según la propia MPAA, se debe en parte a la falta de participación de los servicios de Internet, ya que podrían hacer más para combatir la piratería. Aunque hoy en día existen algunos acuerdos voluntarios por parte de algunas empresas ajenas a todo esto pero que quieren participar en esta lucha, la organización dice que eso no es suficiente, ya que otras plataformas e intermediarios deberían seguir su ejemplo.
Por tanto ahora se quiere incluir en todo ello un elemento que hasta ahora había sido dejado un poco de lado en esta batalla contra la piratería de contenidos con copyright, nos referimos a los proveedores de alojamiento. Y es que se considera que hoy día estos servicios de Internet en concreto, tienen la capacidad de cerrar sitios pirata por sí mismos, sin embargo, según la MPAA, muchos se niegan a hacerlo voluntariamente. Consideran que dado el importante papel de estos proveedores de alojamiento en el ecosistema on-line, es desconcertante que muchos se nieguen a tomar medidas de eliminación cuando se les notifica que sus servicios están siendo utilizados en una clara violación de sus propios términos, atentando contra la propiedad intelectual.
La MPAA quiere una mayor involucración de ciertas empresas contra la piratería
Por tanto desde el punto de vista del grupo asociado a Hollywood, esto tiene que cambiar de manera radical, de hecho se pretende que además de procesar los avisos de retirada y la eliminación de los infractores reincidentes, como exige la ley, la MPAA también quiere que las empresas de alojamiento utilicen filtros de piratería automatizados en sus servidores de manera obligatoria.
De este modo los proveedores de alojamiento web deberían filtrar a sus clientes utilizando una tecnología de reconocimiento de contenido automatizado para poder eliminar a los infractores reincidentes después de recibir un número razonable de notificaciones, así como impedir que los usuarios dados de baja vuelvan a registrarse.
Pero la cosa no acaba ahí, ya que la organización antipiratería pide que los proveedores de alojamiento no impugnen las órdenes judiciales de suspensión para los portales pirata cuando los titulares de derechos de autor se enfrentan a los mismos. Y yendo un paso más allá, estos «anfitriones» de los sitios de Internet deberían estar atentos a los altos volúmenes de tráfico de los sitios pirata, y cortarlo de inmediato o implementen establecer limitaciones de ancho de banda. Por ejemplo, con estas nuevas medidas los proveedores de alojamiento lograrían que los visitantes de The Pirate Bay, no puedan entrar al portal a través de un enlace directo.
Pero claro, este tipo de medidas, como sucede en otros casos similares de empresas que ofrecen servicios on-line, va en contra de sus propios intereses de negocio, ya que están negando ese servicio que ofrecen a determinados clientes, lo que les puede reportar importantes pérdidas a muchos niveles.
