El ‘invento’ de Kitty Hawk es una aeronave que puede volar a una velocidad máxima de 150 km/h, y que además cuenta con una autonomía de 100 kilómetros, aproximadamente. El tamaño es de unos 11 metros de largo, motivo por el cual su aplicación podría alcanzar al uso urbano y cercano al mismo. Además, en su interior cuenta con espacio para dos pasajeros, que irán sentados uno al lado del otro. Pero sin duda, la clave en esta aeronave es que no hace falta piloto, ni licencia de piloto, porque la compañía pretende que sea autónomo al 100%, desde el despegue hasta el vuelo completo.

Un ‘taxi’ autónomo y volador: se llama Cora, mide 11 metros, y puede volar por sí solo hasta 100 km de distancia a un máximo de 150 km/h

La compañía tiene previsto el lanzamiento de Cora para el año 2021, después que se hayan completado las primeras pruebas en Nueva Zelanda. Es este país el que ha apoyado por primera vez los test que se van a llevar a cabo, pero Kitty Hawk está persiguiendo que la regulación se extienda de la misma manera a otros países. De momento, lo que han enseñado es su diseño y algunas de las claves de su funcionamiento. Las prestaciones que ofrece, y que comentábamos anteriormente, son las que se han conseguido por el momento, pero no sería extraño que más adelante aumente su autonomía y pueda ofrecer velocidades de vuelo aún mayores.

Pero lo que se pretende con esta aeronave autónoma es dar lugar a una flota completa que trabaje conformando un servicio de taxis autónomos. Un proyecto prometedor que debería arrancar sus operaciones a nivel comercial de aquí a dentro de tan solo tres años. Y en todo esto, quizá lo más complicado sea conseguir elaborar una red de funcionamiento con los puntos de recogida y aterrizaje.

 

Fuente: techcrunch | adslzone