Los cables submarinos conectan todo nuestra planeta entre sí a cientos de metros bajo el nivel del mar. Actualmente, mientras se estudian alternativas como las redes de satélites (Starlink de SpaceX por ejemplo), son básicos para ofrecer Internet y comunicaciones entre países y continentes. Además, la creciente necesidad de conexión hace necesario el despliegue de cables más modernos y rápidos.

El último gran cable desplegado es Marea, que une EEUU y España. Su instalación comenzó en junio y se completó el pasado mes de septiembre. El proyecto, a cargo de Microsoft, Facebook y Telxius, estará disponible a principios de 2018 ofreciendo una velocidad de 160 Tbps a través de un cable de 6.600 kilómetros. En realidad, el cable submarino por dentro cuenta con ocho pares de fibra de 20 Tbps cada una.

Ahora se desplegará el primer cable submarino directo entre Europa y Sudamérica

Siguiendo con esta fiebre de los cables submarinos, hemos conocido otro proyecto que se pondrá en marcha a principios de 2018. En este caso, el cable submarino será el primero que une de forma directa Europa con Sudamérica. Hasta ahora, los cables llegaban a Estados Unidos y de ahí al sur del continente. El proyecto tiene un coste de 170 millones de euros y estará finalizado en 24 meses.

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Se colocarán 10.000 kilómetros de cable a través del Atlántico entre Alentejo en Portugal y Fortaleza en Brasil. Según ha declarado el representante del proyecto que forma parte de la empresa hispano-brasileña Ellalink, este cable permitirá “comunicaciones más rápidas entre los dos continentes utilizando la última generación de equipamiento disponible”.

Nos aclara que su velocidad inicial será de 50 Tbps, aunque puede ser expandido en un futuro hasta los 72 Tbps. Desde la empresa responsable creen que el despliegue de este cable ayudará a reducir los precios de Internet en América Latina y proveerá más seguridad en las comunicaciones con Europa.

 

Fuente: telecompaper | adslzone