Se quiere acabar con la evasión de impuestos en ventas digitales

Será la semana que viene cuando los ministros se reúnan para discutir cuáles van a ser los cambios que van a realizar para que los gigantes online paguen impuestos, en lugar de evadirlos en la práctica totalidad. Cada vez es mayor la presión que reciben estas empresas para pagar sus impuestos en la UE, pero las limitaciones legales han hecho que en algunas ocasiones sea difícil exigirles el dinero, tal y como está ocurriendo en algunos casos actuales, como el que afecta a Apple e Irlanda con 13.000 millones de euros de impuestos no pagados.

Así, lo que se busca es que paguen en la Unión Europea todo el dinero generado e ingresado en los países miembros, sin que este sea tributado mediante argucias legales en otros países. Para evitar que el marco legal favorezca que las compañías digitales evadan impuestos, el documento que se tratará la semana que viene propondrá una reforma de las leyes impositivas internacionales para hacer que las multinacionales digitales paguen impuestos donde crean el valor, y no donde tengan establecida su residencia legal. Para ello, se cambiará el concepto de “residencia permanente”.

El pasado mes de julio, Google se libró de pagar 1.100 millones de euros en impuestos atrasados en Francia debido a que la compañía no tenía residencia permanente en Francia, sino en Irlanda, desde donde hacía todas sus operaciones. Así, no estaba obligada a pagar esos impuestos.

Residencia virtual permanente, clave para exigir el pago de impuestos

Por ello, aunque no haya presencia física en un país, se le podrá exigir a los gigantes digitales el pago del dinero generado en cada país. Mediante la definición de una residencia “virtual” permanente ya se podría justificar la exigencia del pago de esos impuestos. Con esta propuesta, se va un paso más allá de los principios impositivos acordados por los países miembros de la OCDE. También es más ambiciosa que algunos planeas actuales de la Unión Europea, como la creación de una base imponible común para las empresas.

Los 28 estados miembros de la UE tienen derecho a veto en esta propuesta, y en ocasiones anteriores han conseguido bloquearlas. La propia Irlanda podría bloquearla para beneficiar a Apple y a otras empresas digitales que tienen sede en el país. Las discusiones empezarán la semana que viene, y se alargarán hasta diciembre, donde se intentará alcanzar una postura común. Si se consigue aplicar un cambia a nivel europeo, éste se llevaría consecuentemente también a nivel mundial.

 

Fuente: Reuters | adslzone