Y es que tal y como hemos podido saber de la mano de Ignacio del Castillo del diario Expansión, parece ser que el «culebrón» en el que se está convirtiendo la venta de Yoigo ha vuelto a cambiar de protagonista poniéndose la operadora MásMóvil a la cabeza para finalmente hacerse con la firma. Según las informaciones, este grupo español que recientemente ha comprado Pepephone, se ha situado en primer lugar en las negociaciones con el grupo de origen sueco, Telia, para hacerse con Yoigo, grupo que cuenta con más del 76% del capital de la compañía de telecomunicaciones adelantando de este modo a la que hasta la fecha parecía la más cercana de cerrar un acuerdo, Zegona.

Estos últimos comenzaron con las negociaciones el pasado 18 de marzo y a priori parecía que el acuerdo era casi total con Telia para hacerse con Yoigo, acuerdo que venía respaldado, entre otras cosas, gracias a la financiación que recibía de entidades bancarias tales como CaixaBank , Banco Santander, Goldman Sachs y BNP.

Sin embargo cuando todo parecía ir por buen camino, parece ser que el negocio se torció debido fundamentalmente a las negociaciones con grupos minoritarios como ACS, firma que cuenta con el 17% del capital de la operadora. A pesar de que Telia ha aportado un total de 536 millones de euros, debido a que la mencionada ACS ha puesto más de 119 millones, convierten a esta compañía en un eslabón importante a la hora de cerrar la negociación. Algo muy similar ocurre con otros socios minoritarios como FCC y Abengoa, por lo que debido a estos escollos, Telia ha dado por finalizado el período de exclusividad que le había dado a Zegona, por lo que MásMóvil ha vuelto a entrar en el «juego».

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Cabe mencionar que la firma española probablemente tenga más prisa a la hora de hacerse con Yoigo que Zegona, por lo que es posible que esté más dispuesta a escuchar las premisas de los socios minoritarios mencionados para poder llevar la operación a buen puerto. De poder llevarse a cabo, no cabe duda de que MásMóvil daría un importante paso adelante convirtiéndose en un completo operador convergente, algo para lo que la compañía tendría que hacer un desembolso aproximado de 600 millones de euros, donde se incluye la deuda.

Esperaremos a los próximos días (o semanas) para ver cómo finaliza el proceso y cuál es finalmente la firma que se lleva «el gato al agua».

 

Fuente: Expansión | adslzone