Este tipo de productos que en ocasiones se utilizan para llevar a cabo acciones consideradas por la policía como ilegales, en los últimos años ha prosperado en gran medida. Esto se debe entre otras cosas a que ya no son necesarios los costosos equipos y máquinas voluminosas de antaño para la reproducción de estos contenidos, ya sea en sitios públicos o a nivel más privado, sino que ahora vale con dispositivos compatibles con puertos HDMI y con unas dimensiones mucho más reducidas.
En el mercado, tal y como son conscientes los cuerpos de seguridad que luchan contra la piratería, hay varios tipos, pero los más comunes y extendidos son aquellos basados en el sistema operativo de Google, Android. Por lo general estos son diseñados en formato pequeño o set-top y además pueden ser cargados de software de medios oficiales a través de la Google Play, por ejemplo, o usando productos no oficiales como versiones personalizadas de Kodi, Showbox o Popcorn Time.
Lo más interesante de estos sistemas es que son muy baratos y proporcionan a los usuarios acceso a una enorme variedad de contenido libre, películas, programas de televisión o deportes en directo. Es por ello que los titulares de derechos de autor de todo el mundo estén endureciendo las medidas en contra de los que venden estos productos.
Entre estas destacan acciones como las llevadas a cabo por FACT (Federation Against Copyright Theft) junto a la policía realizando una serie de redadas en el Reino Unido contra algunos establecimientos que ofrecen esta tecnología a los usuarios. De hecho según la policía local, dos de estos locales fueron registrados en Glasgow esta semana como parte de lo que describen como la operación más grande del mundo en contra de las cajas set-top, investigación que lleva en marcha los últimos 16 meses.
Mientras que las compañías de cine han mostrado un interés especial en estos dispositivos en lo que se refiere a su campo, parece que el enfoque en Escocia se dirige más a la retransmisión de eventos deportivos en directo. Se estima que al menos 500 bares podrían estar involucrados, aunque la investigación actual apunta incluso que podría haber miles.
La policía asegura que los dueños de estos locales públicos así como el público en general deben ser conscientes de que estas «cajas» set-top con aplicaciones y complementos que permiten la transmisión de contenidos pirata son ilegales. Por lo tanto pretenden seguir con la operación, que han denominado como la más grande del mundo en este sentido, para acabar con la venta ilegal de estos productos.
Fuente: TorrentFreak | adslzone
