La idea inicial no fue de la compañía de Redmond, Microsoft, sino que fue la finlandesa Nokia la que dio vida con la gama Nokia X a su proyecto Normandy, una línea de teléfonos inteligentes de gama básica con sistema operativo móvil Android. Como cabía esperar, tras la compra de la división móvil de la finlandesa por parte de Microsoft, la gama de terminales Nokia X no se extinguirá, pero dejará de tener Android próximamente, igual que los “Galaxy Gear” de Samsung vieron su SO modificado en favor de Tizen OS. No obstante, parece que Microsoft no pretende acabar con Android en sus planes de futuro, sino simplemente dar vía libre a los sucesores del exitoso Nokia Lumia 520 y, en un futuro, trabajar con Android de la mano de Cyanogen.

Cyanogen, ¿el Android que Microsoft necesita?

Actualmente Cyanogen se dedica al desarrollo independiente de ROMs sobre Android para teléfonos inteligentes compatibles. Gracias a ellos reciben soporte terminales desactualizados y los “actualizados” reciben novedades de su mano -Cyanogen- antes que del fabricante. En cualquier caso, además, trabajan también con OnePlus para dar a su único dispositivo móvil un firmware único con características añadidas como, entre otras cosas, un selector de temas que aumenta aún más las posibilidades de Android.

Según la información que llega, Microsoft estaría interesada en comprar Cyanogen, lo cual nos indica, entre otras posibilidades, la adopción del software que éstos desarrollan a una línea de terminales paralela a los Nokia Lumia con Windows Phone. Aunque esto podría cumplirse, y antes tendría que tener lugar la compra que nos ocupa en estas líneas, también cabe la posibilidad de que desde Redmond estén buscando únicamente el “talento” de esta compañía como desarrolladores de software. Sin duda, las ideas de los mismos podrían dar un aire fresco al sistema operativo móvil de Microsoft: Windows Phone.

 

Fuente: BGR | adslzone