Actualmente y desde hace poco más de un año, en España disfrutamos del 4G de varios operadores, mientras que los OMV aún no lo ofrecen en su catálogo de servicios. Sin embargo, los operadores necesitan de la implementación del nuevo “plan técnico” para el desarrollo correcto de estas redes de cuarta generación. En otros países, a diferencia de España, ya utilizan conexiones 4G el doble de rápidas que aquí. No obstante, tras la prórroga de Europa, que retrasó hasta el 1 de enero de 2015 la aplicación del mandato de liberación, España contará con el desarrollo exigido.

Las redes 4G LTE serán más estables y veloces

Como adelantábamos, en España ya se ofrecen tarifas compatibles con la conexión de cuarta generación, el 4G LTE, pero aún no han podido desarrollarse como debieran. Esto último, cambiará drásticamente con el nuevo plan técnico del Dividendo Digital que, según el Ministerio de Industria, Energía y Turismo, será presentado antes de que finalice el próximo mes de julio. Mientras tanto, el espectro correspondiente al 4G ya ha sido pagado por los operadores, que han desembolsado 1.600 millones de euros.

La televisión digital -TDT- sufrió recientemente los errores del anterior Gobierno y la sentencia del Tribunal Supremo que acabó con nueve canales recientemente por las asignaciones ilegales. Y, ahondando en el tema relacionado con la TDT, el Ministerio correspondiente está barajando la posibilidad de abrir un concurso para el espectro “sobrante” del 4G, que podría ser utilizado por medios televisivos.

¿Qué cambiará con respecto al 4G actual?

La liberación de la banda de 800 MHz permitirá aumentar la potencia de señal de las redes y su penetración. Esto quiere decir no sólo que se mejorará la cobertura en lugares a los que ya llega el 4G, sino que el mapa de cobertura, además, será ampliado. Por otra parte, la cobertura en interiores también se verá optimizada. Además, las conexiones 4G LTE permitirán una mayor velocidad de descarga gracias al LTE Advanced, con la utilización de frecuencias en combinación. Y es que, por ahora, la velocidad del 4G está muy por debajo de la esperada y prometida por los operadores.

 

Fuente: El Economista | adslzone