El 5G tiene una fecha oficial prevista de llegada que se ha fijado para el año 2020, aunque desde este mismo verano podremos asistir a las primeras pruebas de campo reales que darán una buena muestra de las bondades de este nuevo tipo de redes móviles. Por el momento los fabricantes tecnológicos y los operadores trabajan de manera conjunta para tratar de desarrollar tecnologías y productos que permitan explotar todas las posibilidades del 5G que permitirá soportar un mayor número de dispositivos conectados, a la vez que ofrecer una velocidad de transferencia de datos superior a los 20 Gbps.

Uno de los proyectos europeos que tienen en mente el objetivo del 2020 es 5G NORMA, una iniciativa que buscará crear una nueva arquitectura de redes móviles para adaptarse a las necesidades de la demanda dependiendo de cada momento y situación y repartir eficientemente los recursos entre los operadores. Esta característica será vital para que el 5G de soporte a multitud de nuevos productos wearable como relojes, pulseras o gafas, que compartirán el acceso a las redes móviles en el futuro.

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El  2016 será escenario de más pruebas reales para el 5G en Europa

SESAME es otro proyecto sobre el 5G que permitirá a Europa asentar las bases para implantar estas redes en todo el continente de manera mucho más rápido al permitir virtualizar muchos servicios 5G, habilitando small cells multi-operador en la nube. En la misma línea también se han desarrollado proyectos como T-NOVA o SONATA, cuyo kit de desarrollo se encargará de proporcionar herramientas más eficientes a los desarrolladores de funciones de red y servicios compuestos en el 5G.

El laboratorio 5TONIC que tiene su base en España, es el fruto de un acuerdo de colaboración entre la operadora Telefónica y el fabricante electrónico Ericsson cuyo objetivo es ensayar los servicios y capacidades de las redes 5G antes de ser aplicadas al ámbito comercial, desarrollando pruebas de campo reales en los próximos meses, y los progresos continuarán durante la próxima década ya que se espera que la tecnología 5G alcance la madurez de aquí a 10 años.

 

Fuente: El Economista | adslzone