La apertura de las redes de los operadores tradicionales posibilitó la aparición de los OMV, u operadores móviles virtuales, en el mercado Español. Los usuarios agradecieron la llegada de nuevos rivales y la bajada de los precios. Desde la aparición del primer OMV, han aparecido decenas de ellas, algunos que siguen adelante y otros que han pasado a mejor vida. Esto también sirvió para que algunos operadores con redes propias de banda ancha fija, como Euskaltel, lanzara sus ofertas de móvil gracias a acuerdos con operadores tradicionales.
En estos momentos, Euskaltel opera como operador móvil virtual gracias aun acuerdo de interconexión con Orange. Los clientes disfrutan de la misma cobertura que tienen los que pertenecen a la operadora francesa y desde hace unas pocas semanas, también pueden acceder a la tecnología 4G en algunas de las tarifas. Las últimas informaciones apuntan a que Euskaltel habría decidido construir su propia red de antenas móviles para operar en las principales ciudades de Euskadi y Galicia.
La lucha por ser el cuarto operador
La consolidación del sector es un hecho y el número de compañías de telecomunicaciones se irá reduciendo a la mínima expresión en los próximos años. Por el momento, ya hemos asistido a varios movimientos cruciales en este sentido, como la compra de ONO por Vodafone, la de Jazztel por Orange o la de R por Euskaltel, operadora que nos ocupa en este artículo.
Tampoco podemos olvidar todas las compras realizadas por MásMóvil durante estos meses, incluyendo las redes sobrantes de Jazztel-Orange, en su objetivo por ser el cuarto operador. Pero esto no es lo único. Ya se empieza a apuntar a una posible compra de Yoigo por parte de la cablera asturiana Telecable en una consolidación sin precedentes de las compañías del norte de España.
¿Qué os parece el movimiento de Euskaltel?
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