Llamadas a cero céntimos minuto, ese es el reclamo que utilizan gran parte de los operadores para tratar de captar clientes de móvil, sin embargo, el Se dispara el coste del establecimiento de llamada aparece siempre en la letra pequeña. Primero fue Movistar quien decidió aumentar de 18 a 20 céntimos al comenzar el año, seguidamente Vodafone hizo lo propio y en abril confirmó la subida. Los últimos han sido Orange y Yoigo que también han calcado la misma estrategia de los rivales.

Subida constante

El polémico establecimiento costaba inicialmente en España 14 céntimos de euro cuando llegaron las primeras ofertas de telefonía móvil. En aquella época los operadores cobraban el primer minuto completo y les salía muy a cuenta tener un establecimiento más bajo. Después el regulador decidió obligar a las compañías a facturar por segundos y fue entonces cuando las tres grandes aumentaron hasta los 17 céntimos. Yoigo fue la única que se desmarcó con un establecimiento más reducido pero rápidamente equiparó al precio al de sus rivales. Con la subida del IVA y la bajada del precio por minuto, las compañías han aprovechado y lo han situado en 20 céntimos. Para hacernos una idea, cinco llamadas al día inferiores a un minuto con una tarifa de cero céntimos suponen 30 euros al mes.

¿Y los OMV?

De momento no ha habido movimiento pero no sería descabellado pensar que los operadores móviles virtuales copiaran a los cuatro grandes. Según la CNMC, el establecimiento no está regulado y cualquier compañía puede modificarlo a su antojo, incluso suprimirlo, algo que a juzgar por la estrategia de las empresas no va a suceder a corto plazo. Parece claro que las ofertas con un bono de llamadas asociadas a datos son las más rentables para las telecos porque suponen un ingreso fijo al mes, sin embargo hay usuarios que utilizan solo ocasionalmente el teléfono y por eso prefieren ofertas con tarificación por minuto.

España única en Europa

Italia es el único país donde los operadores también han facturado el establecimiento a sus usuarios, sin embargo es una tasa que poco a poco va desapareciendo. En España ya lo advertimos en abril, la banda ancha y la telefonía móvil subiría de precio y es que la guerra sin cuartel que hemos visto en los últimos años ha lastrado las cuentas de todas las telecos. De momento, todos los paquetes convergentes han subido entre 1 y 5 euros, en el caso de las ofertas de móvil, además del establecimiento, los bonos con datos también han subido de precio, eso sí, ahora las franquicias son mayores que hace un año.

 

Fuente: adslzone