Después de tener luz verde de Europa y cerrar con éxito la OPA, Orange ya está definiendo las líneas maestras para la integración de Jazztel. Una de las áreas clave, como no podía ser de otra forma, pasa por acelerar la comercialización de productos y servicios basados en fibra óptica como los paquetes convergentes de fijo y móvil. Por todo ello, es muy importante la red de Jazztel que fue uno de los motivos principales para que Orange se interesara en su compra.
La compañía ahora seguirá los pasos de Movistar para ir migrando progresivamente a los clientes de ADSL a las redes de fibra de Jazztel. La idea es intentar tener a la práctica totalidad de los clientes en esta tecnología, que además de velocidad muy superiores, permite comercializar servicios adicional de valor como la televisión en alta definición.
Con la compra de Jazztel, Orange tiene acceso a una red de fibra óptica que en el mes de marzo contaba con 3,7 millones de hogares pasados y ronda ya los 4 millones en estos momentos. A esto debemos sumarle su cerca de 1 millón de unidades inmobiliarias ya desplegadas. Los planes conjuntos una vez confirmada la compra pasando por tener 10 millones de hogares con cobertura a finales de 2016.
En estos momentos, Orange cuenta con 3,3 millones de clientes ADSL que son susceptibles de ser migrados a las redes de fibra óptica de Jazztel. Los que tengan cobertura de fibra serán propuestos para cambiar aunque por el momento no se han revelado más detalles. Los franceses siguen trabajando en una migración que quieren que sea rápida y sencilla, lo que les reportará 1.300 millones de euros en sinergias.
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