Pasar o no por un micropago es una decisión del usuario, por lo que esto en un principio no supone ningún problema al menos que se trate de un niño. Muchas veces los niños terminan tramitando micropagos sin conocimiento ni consentimiento de sus padres debido a que se dejan llevar por el ansia de ir más allá en el juego. Esta situación se vuelve algo a tener muy presente si se tiene en cuenta que la mitad de los niños españoles de 11 años tiene un móvil, un porcentaje que se dispara al 93% cuando hablamos de adolescentes de 15 años, según el Instituto Nacional de Estadística.

Los micropagos pueden ofrecer todo tipo de contenidos: niveles adicionales, posibilidad de avanzar más deprisa en el juego, nuevos trajes para el personaje o dibujos para tunear un coche, vidas extra, dinero extra, etc. Esto ya depende de cada juego.

El hecho de que los niños puedan realizar compras de forma impulsiva y sin control puede terminar disparando la factura, habiendo casos en los que la cuantía ha superado los 10.000 euros. Para evitar estos disgustos, al igual que cuando se combate el malware, la prevención termina siendo la mejor medida.

G DATA Internet Security para Android permite a los padres configurar un modo infantil en los smartphones y tablets de sus hijos, pudiendo limitar el tiempo de uso y bloquear aplicaciones que no deben ser utilizadas por menores bien porque podrían ser susceptibles de provocar compras o son demasiado profesionales o personales. Por otro lado, se pueden seguir estos cuatro consejos para evitar las compras compulsivas por parte de los niños:

  • Supervisar las aplicaciones y el uso que los menores hacen del dispositivo. Muchos padres no saben en qué aplicaciones invierten sus hijos el tiempo que pasan conectados a sus dispositivos móviles. Por muchos motivos es recomendable saber cuáles son, cómo funcionan y si son susceptibles de provocar estas compras accidentales
  • Bloquear la función de compras integradas: iOS permite desactivar las compras dentro de las aplicacones y Android ofrece la posibilidad de pedir una autenticación cada vez que se realiza una compra.
  • No compartir nunca las contraseñas utilizadas para realizar compras integradas.
  • Instalar una aplicación de seguridad en el dispositivo. G DATA Mobile Internet Security no solo garantiza la seguridad y protege los datos personales almacenados en el smartphone, sino que también incorpora funciones para limitar el tiempo de uso de cada aplicación o, incluso, bloquear el acceso a aquellas desde las que se pueden realizar compras o descargar aplicaciones de pago. Además, G DATA también bloquea las llamadas y mensajes a números Premium, evitando así posibles disgustos por una factura elevada.

 

Fuente: muyseguridad