Según la firma de investigación, existen varios motivos para este incremento. Por un lado las iniciativas gubernamentales, que está relacionado con el fomento de una mayor legislación. Otra de las causas para la subida es el gasto en los ataques, sobre todo en los casos de robo de información y brechas en la seguridad de alto nivel. Casos como, por ejemplo, el de Ashley Madison, en el que un grupo de hackers se hicieron con los datos de los usuarios del portal de citas extramatrimoniales, entre los que estaba información bancaria y direcciones, para filtrarlos un mes después.

Son, por tanto, muchos actores los que están centrando su interés, y con él sus inversiones, en las tecnologías de la seguridad, entre los que destacan, “particularmente, la nube, la informática móvil, y ahora también el Internet de las cosas”, explica Elizabeth Kim, analista de Gartner. Kim también ha destacado la importancia de los ataques a objetivos de alto nivel y del gasto empleado en solucionarlos.

 

Fuente: muyseguridad