La principal ventaja de un NGFW, que es un sistema de seguridad de red, basado tanto en hardware como en software, es que es capaz de detectar y bloquear ataques sofisticados a nivel de aplicaciones. Frente a los firewalls tradicionales, que ofrecían una seguridad basada en puertos, la nueva generación de cortafuegos es capaz de inspeccionar todo el tráfico, incluidas las aplicaciones, las amenazas y el contenido, y lo vincula al usuario independientemente de la ubicación o el tipo de dispositivo.

La firma de investigación ABI Research asegura, que para finales de este año el número de incidentes de seguridad relacionados con TPV alcanzará los 600, frente a los 198 incidentes del mismo tipo detectados en 2014. El crecimiento del malware para TPV, está generando la demanda de soluciones de seguridad capaces de proteger los entornos de los terminales punto de venta.

Como explican desde ABI Research, “una de las tecnologías clave que puede ser desplegada para proteger la TPV es la segmentación de red que puede ser conseguida desplegando un NGFW”; y es que una vez que se ha producido un acceso no autorizado esa segmentación puede reducir la amenaza al limitar los movimientos de la misma. “La principal ventaja que los NGFW ofrecen en la segmentación de la red es que los servidores de aplicaciones y de datos puede ser designado en diferentes segmentos en función de sus factores de riesgo y las clasificaciones de seguridad, con un acceso a ellos muy controlado”, aseguran.

 

Fuente: muyseguridad