A partir del verano de 2013, sin embargo, todo cambió en el panorama mundial de la seguridad y privacidad en línea, a causa del escándalo de espionaje masivo PRISM, revelado por el exingeniero de la NSA Edward Snowden. Mucho se ha hablado de ello, pero la desconfianza en Internet ha prendido mecha. Y las empresas que más tienen que perder, son los gigantes de la Red, donde Google es el rey.

De hecho, hace apenas un mes que Google anunciaba una extensión de su sistema de cifrado para todas las comunicaciones entre centros de datos, y las declaraciones de Mountain View a ese respecto no dejaban lugar a dudas:

Esto asegura que sus mensajes son seguros, no sólo cuando se mueven entre el usuario y los servidores de Gmail, sino también cuando se mueven entre los centros, algo que en Google hicimos una prioridad después de las revelaciones del pasado verano“.

Ahora, según publican en VentureBeat con referencia a fuentes internas de la compañía, es que el próximo paso comprende una facilitación de GPG para el cifrado de mensajes de correo electrónico, algo que ya se puede hacer -y que muchos usuarios hacen- pero que, debido a la dificultad de su configuración, queda fuera del alcance del usuario medio.

¿Cómo lo harán? Esa es la gran duda, porque, no conviene olvidarlo, Google vive principalmente de la publicidad, y es bien sabido que Gmail escanea de manera automática todos los mensajes para ofrecer publicidad en base a las “palabras clave” que el motor encuentra en los textos.Por cierto, hace poco explicamos cómo cifrar los mensajes de Gmail en Chrome de manera muy sencilla.

 

Fuente: muyseguridad