Y, sinceramente, no es de extrañar, pues a PRISM, que supuestamente solo afectaba a usuarios fuera de Estados Unidos, se han ido sumando informaciones de todo tipo en las que parece haber una cosa bien clara: prácticamente todos los gobiernos espían todo lo que pueden, saltándose la legalidad a la torera.
Así, repetimos, no es de extrañar que un importante número creciente de personas en todo el globo se haya lanzado a utilizar soluciones que, por lo que se sabe, garantizan la privacidad en línea al máximo nivel, principalmente en la forma de Tor u otras herramientas basadas en éste: distribuciones GNU/Linux como Tails, o navegadores web como PirateBrowser, entre otras.
Aunque, como ya sabes, la forma más sencilla de utilizar Tor es hacerlo mediante Tor Browser Bundle, o lo que es lo mismo, Tor integrado en Mozilla Firefox.
Pero no podemos cerrar esta nota sin mostrarte “la prueba del delito”. Así se ha disparado el uso de Tor:
Fuente: muyseguridad