Con esto, Blablacar parece responder a lo vivido recientemente en España, donde hemos visto cómo se han ido sucediendo episodios al respecto del conflicto surgido entre los gremios de taxistas y transportistas y las distintas aplicaciones y webs. Servicios como el de la app estadounidense Uber, o la propia web francesa, se ofrecen como nexo para usuarios que busquen compartir su vehículo y aquellos que requieran de un medio de transporte para llegar a su destino.

apertura-blablacarEl espíritu de iniciativas como Blablacar era crear una comunidad de usuarios entre la que promover el uso compartido de vehículos, permitiendo a los viajeros que se ponían en contacto el ahorro de los costes propios del desplazamiento. Pero conforme dichos servicios comenzaron a ganar popularidad entre la sociedad, empezaron a alzarse voces discrepantes entre los profesionales del sector de transportes que denunciaban este hecho como un intrusismo en el negocio.

La Confederación del Taxi de España se alzaba en armas contra Uber y exigía en abril su cese inmediato y la retirada de la conocida aplicación. Por su parte, Blablacar, que defiende que su actividad se ajusta a la legalidad, veía como diversas asociaciones profesionales de transportistas clamaban contra la competencia desleal que según estos colectivos, ejercía el servicio web, al no pagar impuestos u otras tasas administrativas.

Blablacar, ha dado un golpe de timón con el cobro de esta comisión en nuestro país, algo que sigue los pasos de lo que venía haciendo desde hace unos meses en Francia. Serán únicamente los pasajeros los que soporten este recargo sobre la tarifa fijada por el conductor, quien quedará excluido del nuevo cargo.  Según Blablacar, la aplicación en España de esta modalidad de pago ya estaba prevista para 2014 y aunque se encuentra en fase piloto, su objetivo es consolidarla de aquí a final de año. Se ven afectadas con ello las condiciones de reserva del viaje, al limitar la web el intercambio físico de dinero entre conductor y pasajero, siendo necesario el pago online por anticipado.

Veremos cómo acepta la comunidad de usuarios estos nuevos cambios en la política del consumo colaborativo de Blablacar, y si ello puede suponer un riesgo para su viabilidad tal y como la conocíamos hasta ahora.

 

Fuente: Teknautas | adslzone