Las empresas de entretenimiento engloban la música, las películas, los juegos, etc; y no cabe duda de que se llevarían una gran alegría si el fenómeno de la piratería en Internet acabase mañana mismo, por otro lado cosa bastante complicada. Como resultado, grandes sumas de dinero se gastan todos los días en un esfuerzo por mantener la distribución ilegal bajo cierto control. A lo largo de los años, más de una década, se han empleado muchas estrategias, varias de ellas implicando directamente a los usuarios finales. Pero es que el mundo es muy grande y la lucha contra la piratería difiere de una región a otra, por lo que la respuesta a la pregunta inicial es que siempre hay algún tipo de riesgo asociado a la descarga y uso de contenido pirata, pero con ciertos matices.

Uno de los sistemas más utilizados a lo largo de estos años por la comunidad pirata es el protocolo BitTorrent, entre otros, que por su misma naturaleza permite acceder a contenidos con copyright pero con ciertos riesgos. Dado que los clientes de descarga también distribuyen contenidos y las direcciones IP son públicas, los usuarios de torrents son muy fáciles de rastrear. De hecho con un pequeño equipo y ciertos conocimientos, cualquier titular de derechos de autor es capaz de localizar y en teoría descubrir la identidad de estos usuarios. Sin embargo, mientras que casi cualquiera puede localizar a un usuario de torrents ilícitos, la gran pregunta es si hay alguien que tenga la intención de hacer algo al respecto.

bittorrent

Decimos esto porque en pleno 2017, siguen siendo estadísticamente poco probable que los usuarios de estos sistemas tengan que afrontar alguna consecuencia. Por ejemplo en Estados Unidos, donde la violación de los derechos de autor puede suponer un serio problema para aquellos que sean detectados, tan solo afecta a una diminuta proporción de usuarios, ni siquiera llega al 1% del total. Esto significa que millones de usuarios de archivos torrent, a pesar de exponer sus direcciones IP públicamente mientras comparten contenidos protegidos, lo hacen sin problemas significativos. Eso sí, hay que tener en cuenta que de igual modo un gran número de ellos también están tomando algunas precauciones mediante el uso de tecnologías de anonimato como las VPN.

Nuevas alternativas pirata están apareciendo

Por otro lado y a pesar del reciente endurecimiento de las leyes y las medidas tomadas, algo muy similar sucede en el Reino Unido, donde a pesar de que la piratería de contenidos está ampliamente extendida, a pesar de las amenazas y denuncias, pocas veces esto llega realmente a afectar a los piratas. Sin embargo en este caso sus acciones no pasan desapercibidas, por lo que miles de clientes de algunos ISP están recibiendo notificaciones cada mes informándoles de su comportamiento y advirtiendo de que están localizados, aunque luego los castigos rara vez se hacen efectivos. Esto es algo que está sucediendo hoy en día, sin embargo las cosas podrían cambiar fácilmente en cuestión de días, por lo que tampoco hay que confiarse.

El poco interés por parte de la industria del entretenimiento y las organizaciones antipiratería en los usuarios de BitTorrent, en muchas ocasiones se debe a que los recursos necesarios para hacer frente a millones de usuarios son demasiado elevados. Es por ello que las tácticas del miedo se usan de manera habitual esperando algunos resultados, aunque sean escasos, ya que es un sistema mucho más económico. Además estas organizaciones ahora intentan luchar contra la piratería pero de un modo más global y desde la fuente, es decir, bloqueando los fondos publicitarios a sitios pirata, bloqueando el acceso a los portales o presionando a los motores de búsqueda. Pero claro, como hemos dicho anteriormente, un gran número de personas se están protegiendo con VPNs, por ejemplo, lo que complica mucho más la «batalla».

Kodi

Además los sistemas están evolucionando con el paso del tiempo, mientras que hace unos años la mayoría de la gente descargaba películas o música de los sitios de torrent, ahora ya se han extendido otros métodos como los portales streaming, la descarga directa o el software tipo Kodi, alternativas que en la mayoría de los casos no se pueden rastrear. Además, sirva como ejemplo lo que muchos grupos antipiratería piensan últimamente, y es que para qué molestarse con los sitios pirata cuando la gente simplemente puede extraer música de sitios como YouTube en pocos segundos. Como resultado de todo ello, los portales torrent y sus usuarios reciben muchísimas menos «atenciones» de estos grupos que antaño.

En pocas palabras, los millones de personas que a diario obtienen y comparten contenidos protegidos por derechos de autor usando BitTorrent, a pesar de correr algunos riesgos, lo más probable es que nunca sufran las consecuencias de todo ello a nivel legal, al menos por el momento y en los tiempos que corren.

 

Fuente: TF | adslzone