Tiene un punto negativo, si es que podemos sacarle “peros”, y es que no nos evitará pagar una cuota mensual por navegar de forma anónima por Internet. Keezel, aunque simplifica el proceso en gran medida, sigue haciendo uso de una red privada virtual con servidores “ajenos”. Lo que sí es cierto es que, por una cuota fija, tendremos disponibles varias posibilidades para navegar de forma anónima, y no una única contratada que, en caso de tener problemas, nos dejaría al descubierto hasta que todo vuelva a la normalidad.

En cualquier caso, centrándonos en lo que es el producto, tal y como nos cuentan en RedesZone básicamente hablamos de un “intermediario físico” entre una conexión WiFi y nuestro dispositivo, ya sea un ordenador o un móvil o tableta, por ejemplo. Así, lo que haremos será conectar Keezel a la red WiFi con la que vamos a navegar, y el dispositivo final a la red WiFi segura que emite Keezel. Otro punto a su favor que sumar es que, directamente, la red WiFi presta seguridad y anonimato a todos los dispositivos que, ya sin necesidad de configuración extra alguna, conecten a la WiFi de Keezel.

Es interesante, sin duda, y más cuando su batería ofrece autonomía para varios días, lo cual quiere decir que podemos llevárnoslo a cualquier parte para seguir navegando de forma segura en nuestros dispositivos móviles, incluso utilizando redes WiFi públicas o abiertas. Por el momento, ya ha recaudado más de 122.000 dólares en Indiegogo y podemos hacernos con uno por 79 dólares, aunque se empezarán a enviar en diciembre.

Quizá también te pueda interesar…

 

Fuente: adslzone