Instagram estaba convirtiéndose cada vez en una red más utilizada en todo el mundo. La facilidad para compartir fotografías o vídeos, unido a un número cada vez mayor de funcionalidades sociales, han empezado a situarla en popularidad por delante de otras opciones tan potentes como Twitter. De hecho, mientras la red social del pajarito parece algo estancada, Instagram anunció la semana pasada que contaba ya con 300 millones de usuarios registrados.
La actividad de Instagram sigue aumentando en los últimos tiempos y según anunció la compañía, ya se comparten alrededor de 70 millones de fotografías y vídeos cada día. Pero tanta actividad tenía hasta ahora un gran lastre, y es que la plataforma se había llenado de cuentas falsas, spambots o usuarios inactivos desde hacía un largo tiempo. Ante esta problemática, que es frecuente también en otros servicios similares como Facebook o la propia Twitter, la empresa ha decidido filtrar todas aquellas cuentas que hubieran detectado como inoperativas o falsas, reduciendo su número en millones.
La respuesta a esto no se ha hecho esperar y muchos usuarios que eran auténticas celebridades y referencias en Instagram han perdido buena parte de sus seguidores, que en muchos casos no eran más que meros bots. Según denuncian muchos usuarios, aquellas cuentas que han perdido un mayor número de seguidores eran en parte las que habían “comprado” cuentas falsas para engordar su lista de fans y mejorar su posición y estatus en Internet. Cantantes, blogueros, deportistas o incluso políticos, son algunos ejemplos de los que se han visto más afectados.
Pasar de tener 3 millones de seguidores a sólo 8 en cuestión de horas
Algunos casos son realmente peculiares como el del cantante Akon, que ha visto reducida su masa social en un 56 por ciento, tras esta limpieza. Pero tal vez el caso más extremo sea el de la cuenta chiragchirag78, que había pasado de tener más de 3 millones de seguidores, a tan sólo 8. La única decisión del usuario que había detrás de la cuenta tras esta dosis de realidad ha sido cerrar la misma. Este movimiento de Instagram es tal vez el mejor ejemplo para constatar que muchas de las personalidades con influencia en las redes sociales, no tienen tanta influencia como pueda llegar a parecer.
