Con la familia Nexus, Google ha defendido un catálogo de teléfonos inteligentes económicos pero competitivos por sus características técnicas. Eso hasta el Nexus 6, que apostó por unas especificaciones técnicas punteras –por encima de lo habitual- y un precio similar al de sus competidores. Ahora, con los Google Pixel, la firma de Mountain View ha mantenido la tendencia lanzando terminales ‘tope de gama’ con un precio muy parecido al de Apple y Samsung para sus gama alta. Y la próxima generación, los Pixel 2, volverá a lo mismo apostando, además, por pantallas curvas.

Las pantallas curvas serán un ‘estándar’; también en los Google Pixel 2

Esta información sirve para confirmar que las pantallas curvas serán un estándar en la gama alta de teléfonos inteligentes. Pero no solo eso, sino que también se va a convertir en lo habitual ver móviles sin botones físicos en el frontal y, por supuesto, con un alto ratio de superficie delantera ocupada por este componente. Es decir, que los diseños del Samsung Galaxy S8 y el LG G6 serán los que muestren también, en gran medida, los teléfonos de la competencia. Para eso van a servir los 880 millones de dólares que Google ha invertido en LG Display Co.

Lo que Google busca, con esta potente inversión, es convertir a la firma surcoreana en su proveedor de pantallas OLED flexibles que permitirán un diseño curvo en los Google Pixel 2. En cuanto a los plazos, se espera que Google estrene sus nuevos teléfonos inteligentes a finales de este año, y lo que no se conoce por el momento es si volverán a tener una disponibilidad limitada a ciertos mercados, o si bien volverán a venderse fuera de los Estados Unidos en países como España. Algo que, por cierto, sí ocurrió con los dispositivos móviles de la familia Nexus.

 

Fuente: Reuters | adslzone