Un grupo de investigadores de la universidad de Michigan ha desarrollado un material transparente capaz de convertir en electricidad la energía solar recogida, a la vez que permite dejar pasar la luz a través suya. El potencial de este nuevo avance hace pensar en futuras pantallas de teléfonos móviles o tabletas más funcionales y con mayor autonomía gracias al empleo de esta tecnología.

La energía solar es una de las fuentes de energía renovables más limpias que existen. Desde hace algunos años se ha ido acelerando el desarrollo de instalaciones a gran escala para aprovechar la inagotable fuente de energía que nos llega del sol. Además, su aplicación en el ámbito doméstico ha sido muy reseñable ya que la instalación de paneles solares en las viviendas es algo que ha ayudado a mejorar la eficiencia energética de los hogares, a la vez que ha servido para reducir los costes para las familias.

En el campo de los móviles, hemos asistido al lanzamiento de algunos terminales que iban detrás de este concepto. Sin ir más lejos hace unos meses TAG Hauer anunciaba un nuevo dispositivo, aunque en esta ocasión, montaba bajo su pantalla células fotovoltaicas para prolongar las reservas de energía del teléfono móvil. Pero lo novedoso del avance conseguido en el proyecto de la universidad de Michigan es que sería posible desarrollar aparatos electrónicos en los que la propia pantalla fuera capaz de recoger los rayos de luz ultravioleta y dirigir esta energía hacia sus bordes, donde unas finas líneas que actúan como células fotovoltaicas la convertirían en electricidad.

La transparencia es la clave para los investigadores

Según los responsables de la investigación la clave del proyecto radica en haber conseguido la transparencia de este material, lo que lo convierte en candidato idóneo para ser usado en cualquier superficie clara. Además las pruebas llevadas a cabo han demostrado que el uso de materiales plásticos permite una mayor flexibilidad, con lo que las aplicaciones comerciales serían muy amplias.

De hecho, los investigadores han remarcado otros posibles usos que se podría dar a este nuevo material y es por ejemplo la instalación de ventanas eficientes en las casas, edificios de oficinas o plantas de producción. Gracias a la transparencia que se obtiene con esta nueva tecnología, las personas del interior podrán seguir mirando al exterior sin que la luz que pasa a través de las ventanas se vea afectada, como así ocurre al utilizarse cristales tintados.

¿Creéis que en un futuro nuestros gadgets incorporarán esta clase de tecnología?

 

Fuente: Michigan State University | adslzone