Con el argumento de buscar mejores tarifas para los consumidores y amparándose en el buen corazón de los usuarios, la organización está consiguiendo mejorar sus ingresos. Básicamente lo que hace la OCU es organizar una subasta en la cual participan varias empresas y donde se apuntan usuarios (socios y no socios) que quieren ahorrar. La compañía que gana la subasta se lleva esos abonados y a cambio paga una cuota de alta por cada uno. Un negocio redondo que pone en tela de juicio el verdadero objetivo de la organización.
Telecomunicaciones
“Quiero Pagar Menos Movil”. Con este lema la organización puso en marcha una campaña que trataba de conseguir una tarifa exclusiva para los usuarios que permitiera ahorrar con respecto a las ofertas actuales de telefonía móvil. Más de 80.000 usuarios se apuntaron y en la subasta de precios ganó MasMovil. La sorpresa llega al enterarnos que la operadora tendrá que pagar entre 20 y 35 euros por cada alta, lo cual podría suponer más de 2 millones de euros en ingresos para la OCU. Desde la organización justifican que no hay ánimo de lucro y que el cobro del alta por cada cliente sirve para cubrir los gastos de la campaña. ¿De verdad que se han gastado 2 millones de euros en publicitar y gestionar la subasta?. Algunas compañías como Movistar, Orange, Vodafone o virtuales como Pepephone han preferido no participar y es que según reconocen algunas empresas, “no hay transparencia”. Fuentes del sector también aseguran que las ofertas actuales son lo suficientemente atractivas y económicas como para no participar en una subasta de esta índole”. Razón no les falta y es que los precios han caído considerablemente en los últimos años.
Por parte de MasMovil, es loable el esfuerzo que va a hacer la compañía porque ofrecerá una tarifa exclusiva para los usuarios que se han apuntado, eso sí, tendrá que pagar una suma millonaria a la OCU igual que si fuera un distribuidor.
Críticas de los usuarios
Al conocer los pormenores de la subasta algunos usuarios no han tardado en trasladar su malestar y han explicado su experiencia en otras campañas como “Quiero pagar menos luz“. Según explican algunos de ellos, se apuntaron y no recibieron oferta de ningún tipo Otros simplemente recibieron multitud de llamadas para apuntarse como socios y así pagar la cuota mensual de la organización. ¿Falta de ética? Como en todos los ámbitos de la vida, habrá usuarios a favor y en contra pero lo que está claro es que cuanto menos es cuestionable, sobre todo teniendo en cuenta que la OCU utiliza a los medios de comunicación como altavoz para sus campañas vistiéndolo como acciones sociales.
Fuente: adslzone
