Diferentes fuentes y medios llevan tiempo divagando sobre la posible fecha de presentación del próximo terminal de Apple. El baile de ha sido constante, y mientras algunos afirmaban que esta vez, podrían adelantarse y celebrar el evento durante los primeros compases de verano, otros mantenían la idea de que volverían a repetir el procedimiento seguido los últimos años.
Con el paso de los días, esta segunda ha ido tomando fuerza, y cada vez son menos los que apuestan por un lanzamiento temprano. La web japonesa Nikkei ha sido el último en afirmar, que será nuevamente el mes de septiembre el momento elegido. La relevancia de estas declaraciones crece si tenemos en cuenta que ya acertaron con sus predicciones el año pasado sobre el iPhone 5s y 5c.
Basan su pronóstico en la información por la que según ellos, los fabricantes de paneles LCD que colaboran con la compañía, Sharp y LG, podrían aumentar próximamente la producción (durante abril y junio), cumpliendo con el calendario establecido. Este dato concuerda en parte con el aportado hace unos días por Steve Milunovich, de UBS, que indicaba que la fecha estaría establecida como pronto para finales de agosto.
Los encargados del resto de componentes ya están preparándose también. Ayer os informábamos que Simplo y Desay ya habrían recibido los primeros pedidos de baterías, Pegatron y Foxconn estarían preparándose para la producción en masa y los encargados del nuevo chip en Taiwán ya estarían puestos manos a la obra.
Otro de los puntos que más interés ha generado es el más que posible incremento del tamaño y la resolución de la pantalla del terminal. Aquí sí coinciden prácticamente todos los rumores, filtraciones y conceptos y la única duda que queda por resolver es cuál será el tamaño exacto y si finalmente aparecerán dos versiones, una de ellas más cercana a los phablet.
Según Nikkei el tamaño elegido será de 4,7 pulgadas, y es muy probable que llegue una versión mayor, de 5,5 pulgadas. Cifras exactas a las aportadas por Steve Milunovich, aunque el analista vaticina que el lanzamiento no será simultáneo, ya que son muchos los que piensan (también en Cupertino) que esta estrategia perjudicó el pasado año al iPhone 5c.
