Corría el año 2011 cuando Nokia y Microsoft cerraban un acuerdo para la llegada de Windows Phone a los terminales del fabricante escandinavo. Esta posición llevó a algunos ejecutivos de la compañía finlandesa a abandonarla y a embarcarse en un nuevo proyecto, visto la nula confianza de la cúpula directiva en su gran proyecto para este sector tecnológico: el sistema móvil MeeGo.

La iniciativa que había comenzado a desarrollar el fabricante junto a otras grandes compañías como Intel quedaba paralizada y solo vería la luz en el Nokia N9, modelo que quedaría en mera excepción en el mercado. Sin embargo, los directivos que apostaban por esta alternativa insistieron en ella y acabaron impulsando Sailfish OS, plataforma más abierta y libre que Android incluso y que pretende hacerse un hueco entre el sistema de Google, iOS y el propio Windows Phone.

Primer móvil de Jolla ya a la venta

Para ello acaba de llegar el primer terminal de Jolla al mercado. Por ahora solo está disponible en Finlandia, pero su expansión por Europa es cuestión de poco tiempo. Se trata de un equipo de gama media, con una pantalla de 4,5 pulgadas, procesador Qualcomm Snapdragon de doble núcleo a 1,4 GHz, 1 GB de memoria RAM, una memoria interna de 16 GB (ampliable mediante tarjeta microSD), cámara principal de 8 megapíxeles y conexión 4G como principales características. Todo ello por 399 euros en su lanzamiento.

Sailfish OS, el renacer de la esencia de Nokia

No obstante, insistimos en que en su software radica la gran novedad del terminal. Su posibilidad de compatibilidad con las aplicaciones Android es visto como el gran punto fuerte de una plataforma llamada a competir también con otras alternativas como Firefox OS o Tizen, que irán despegando de forma paralela. ¿Inclinará la balanza la experiencia de los fundadores de Jolla en Nokia a favor de Sailfish OS?

 

Fuente: adslzone