Nuestros compañeros de Movilzona reflexionan sobre los cinco mayores errores de BlackBerry a la hora de competir en un sector muy apretado, en el que se han visto superados claramente por la competencia. El mercado ha evolucionado en cuestión de muy pocos años de una forma intensa y el fabricante no ha sabido adaptarse a sus cambios.

La compañía partía de una posición muy cómoda en el momento en el que llegó el iPhone. Sus responsables cometieron el error de pensar que el teclado de sus terminales sería la gran baza contra las pantallas táctiles y el diseño tanto del smartphone de Apple como del resto de equipos que siguieron sus pasos. Su tardía y fallida gama Torch no sirvieron para poner a BB a la altura de iOS. Por si fuera poco, ignoraron el auge de Android y las ventajas de un sistema operativo que fue adoptado de forma masiva por un gran número de fabricantes. Su integración con BB10 también fue tardía.

Pero si en el segmento de los smartphones no supo adaptarse a tiempo, qué decir del salto al de las tabletas. BlackBerry PlayBook es recordado como uno de los mayores fiascos en este mercado dominado por el iPad. Su diseño, características técnicas, capacidad de conectividad y sistema operativo no estuvieron a la altura y fue un sonado fracaso en ventas.

A nivel de software también encontramos errores de bulto. El hecho de pagar por el correo electrónico en nombre de la extrema seguridad del mismo se acabó tornando en contra de la compañía norteamericana ya que poco a poco aparecieron alternativas y la mayoría de los usuarios no ven necesario el pago por este servicio.

Los cinco errores que han condenado a BlackBerry

Por otro lado, hay que remarcar la extrema tardanza en lanzar un móvil con diseño atractivo. Hasta este año no hemos visto un terminal que esté a la altura en este aspecto en comparación con otros súper ventas del mercado. Nos referimos al BlackBerry Z10, cuya inspiración en el iPhone 5 parece obvia, aunque se queda un paso por detrás en prestaciones a un elevado precio de salida marcado en los 600 euros. Su tardanza y carestía no han hecho que BB recupere cuota de mercado.

Por último, la dependencia de los operadores a la hora de fijar sus estrategias comerciales no ha tenido los resultados esperados. Si bien en un primer momento, centrándose en los clientes corporativos, tuvo éxito con esta táctica, con el paso de los años acabó resultando negativa ya que no se dio a conocer su oferta lo suficiente a los usuarios. Mientras, sus rivales apostaron por lanzar poderosas campañas de marketing que, vistos los resultados de la anteriormente conocida como RIM y los suyos, demuestran lo acertado de la decisión.

 

Fuente: adslzone