Poco o nada ha cambiado el panorama en Internet con la ley antidescargas bautizada con los apellidos de sus principales impulsores, los dos últimos ministros de Cultura. A pesar de la polémica que generó su aprobación, los resultados conseguidos hasta ahora por la misma distan mucho de lo pretendido por la industria y por el Gobierno. De nada ha servido la exclusión de la figura judicial para otorgar el poder censor a un organismo administrativo, ya que en el primer año desde que entrase en vigor no hemos conocido el cierre o bloqueo de ninguna web de enlaces.

Según podemos leer en información de EFE, en estos primeros 12 meses se han abierto 361 solicitudes de actuación. Cabe reseñar que 200 de las mismas fueron presentadas por el músico Eme Navarro con el objetivo de demostrar la ineficacia del proceso. Al margen de éstas, que fueron archivadas, también fueron ignoradas 46 por presentar defectos de forma, por lo que nos encontramos realmente con 115 solicitudes de retirada de contenidos por entender sus titulares que se infringen sus derechos de autor.

Tras la apertura de estos expedientes, 23 contenidos (enlaces) se retiraron de forma voluntaria tras recibir la notificación de la Comisión y dos precisaron de una resolución formal para su retirada. En total, se contabiliza la retirada de enlaces a 20 películas, 17 álbumes de música y 4 libros mientras 90 expedientes continúan en "fase de investigación".

La solución podría ser una ley más restrictiva

Estas cifras no han convencido a la industria cultural, principal defensora de la norma. Desde el sector no han tardado en demostrar su decepción por la nula eficacia de la ley y aseguran que siguen perdiendo millones de euros por las descargas mientras son incapaces de lanzar una oferta alternativa legal atractiva y asequible para los usuarios. Sin embargo, su apuesta pasa por presionar para endurecer la norma y para ello han comenzado una campaña de presión al Gobierno que podría dar sus frutos.

Hace unos meses conocimos el supuesto borrador para la reforma de la Ley de Propiedad Intelectual y más recientemente la entrevista del presidente Mariano Rajoy con el líder de la asociación de la industria cinematográfica estadounidense. El objetivo podría pasar no solo por facilitar el cierre de los principales portales de enlaces sino llegar incluso a prohibir las descargas vía P2P y perseguirlas en caso de que prospere la eliminación del derecho a copia privada.

Como adelantábamos hace solo unos días, primavera parece el periodo elegido por José Ignacio Wert para dar una vuelta de tuerca a la norma y contentar así a un sector que sigue sin proponer alternativas más allá de la censura en Internet mientras son incapaces de adaptar su modelo de negocio a la nueva realidad global que ha nacido gracias a la Red.

 

Fuente: adslzone