El último caso sonado lo hemos encontrado con Temple Run 2, el popular juego de carreras que la semana pasada llegó a iOS, cuyo estreno en Android se espera para esta semana. Pero, como podrá suponer el lector, los intentos de estafa han llegado antes que el original.

Lo cuentan en el blog de aficionados El androide libre, donde muestran capturas de pantalla de aplicaciones fraudulentas que se intentan hacer pasar por el título original con el único objetivo de llenar de publicidad al incauto de turno o, mucho peor, de malware.

La gran pregunta es por qué Google sigue permitiendo ese tipo de prácticas, ya que los intentos de engaño han sido eliminados ya del portal, no sin antes haber sido descargados por miles de personas. Todavía más grave es el hecho de que esos mismos desarrolladores pueden seguir publicando apps, incluso después de haber sido pillados.

 

Fuente: muyseguridad