Anonymous vuelve a la carga. Después de varios meses de calma tensa tras el apogeo de sus ataques a comienzos de año propiciados por el polémico cierre de Megaupload, la comunidad de ciberactivistas regresa en forma de ataques de denegación de servicio (DDoS). El objetivo en esta ocasión, varias páginas de Reino Unido. El motivo, la situación de Julian Assange, el fundador de Wikileaks, refugiado político en la Embajada de Ecuador en el país británico.

Recordemos que Anonymous ya actuó para protestar ante la situación de Wikileaks al conocerse las primeras filtraciones en los medios de archivos secretos relacionados con la diplomacia estadounidense. Como forma de boicot a la web de filtraciones, Paypal y Visa suspendieron las cuentas para impedir que Wikileaks se financiase. La respuesta de los hackers fue lanzar sendos ataques masivos a tanto a sus webs como a otras consideradas censoras hasta impedir su acceso durante horas.

Máxima polémica en la actual situación de Assange

El no reconocimiento de la situación de Assange por parte de Reino Unido ha provocado el rechazo de la mayoría de países latinoamericanos y a ellos se ha unido el grupo de hacktivistas de Anonymous, quienes llevan tiempo defendiendo la liberación de Assange, a quien consideran víctima de una persecución política por haber destapado escándalos políticos. En su operación bautizada con el hashtag #OpFreeAssange, los ciberactivistas consiguieron dejar inhabilitadas las webs del Ministerio de Justicia y del primer ministro británicos.

Aunque las páginas ya han restablecido su servicio, los ataques han puesto de relevancia la indignación que existe en la Red por la situación de Assange. La actitud de Reino Unido, que llegó a amenazar con asaltar la Embajada ecuatoriana para detener al periodista, ha abierto un grave conflicto diplomático. Las autoridades británicas vigilan a las puertas del edificio una posible salida del australiano para detenerle y extraditarle a Suecia, de donde podría ser enviado a Estados Unidos. En caso de extraditarse al país norteamericano se teme que se le podría condenar a la pena capital.

 

Fuente: adslzone